Unos jugaron a lo suyo, otros a nada y Messi Balón de Oro

Capello tenía un plan, como en la final de Atenas, y le salió bien. Rijkaard tenía jugadores a los que les faltó juego. No hay un equipo en el mundo que junte a hombres como Xavi, Iniesta, Deco, Messi, Ronaldinho... El Barça los juntó pero careció de una propuesta futbolística. Se olvidó de abrir el campo, todos los ataques iban por el centro, salvo las internadas de Sylvinho, mala señal que este mediocre jugador apareciera tanto.

Rijkaard renunció al orden táctico, los jugadores se estorbaban unos a otros. Ronaldinho y Deco se equivocaron en todas las acciones en las que participaron, lo suyo fue de récord, qué desastre. Zambrotta y Thuram se vieron superados por el partido... Así era difícil desarbolar a un Madrid que mordía, con muchísimas ganas (y poco fútbol). Pues bien, a pesar de todo, el Barcelona de la primera parte se comportó decentemente, era medio reconocible, mereció más. La actuación de Messi quedará en la retina de los aficionados. Se sobrepuso a la apatía de su equipo con unas acciones para el recuerdo.

Pero tras el gol de Van Nistelrooy, precedido de un inicio de la segunda parte arrollador del Barcelona, el partido se acabó. El Madrid no podía estar más a gusto y al Barça le faltó carácter (y le sobró la sustitución de un centrocampista por otro delantero).

Pero se supone que Deco y Ronaldinho volverán a estar, un mes de éstos, bien físicamente, Eto'o tarde o temprano reaparecerá, es de esperar que Rijkaard recupere la disciplina táctica (eso tan sencillito del juego posicional y que corra el balón), Messi seguirá deslumbrando... Y todo volverá a su cauce.

El Madrid no da para muchos comentarios. Guti, Diarra y Emerson taparon bien a los centrocampistas azulgrana y parece que Raúl y Robinho tienen más chispa que la pasada temporada. Poco más...