Medio millón de banderas

Frente al pacto con ETA, el apoyo a las víctimas del terrorismo. Frente a la legalización de Batasuna, medio millón de banderas de España. Frente a la conversación de Henri Parot, el himno nacional. Frente a Patxi López, Francisco José Alcaraz. Frente a ZP, José Antonio Ortega Lara.



Decía ayer Alberto Recarte que el PSOE debería añadir a la colección de catorce notables (aprobados y van que chutan) que han contratado para configurar el programa electoral, a Arnaldo Otegi, a De Juana y a Gerry Adams. Sin la aportación de estos tres personajes, el mensaje socialista de cara a las elecciones quedará cojo.

En la naturaleza de ZP (y en la de buena parte de la izquierda) está el apaño con ETA y la persecución a la AVT, símbolo de la resistencia y la dignidad. En el proyecto de ZP, en esa Segunda Transición que está realizando para entroncar nuestra democracia con la republica de 1931, los nacionalistas y terroristas son los aliados y el PP el enemigo. Por eso ZP no retira la oferta de negociación a ETA, esa resolución ignominosa que se votó en el Congreso. Por eso ZP no quiere ilegalizar al PCTV ni a ANV, que son Batasuna, es decir, ETA.

Desde 2001, no ha dejado de negociar con los terroristas. Así hasta la rendición final.